Comunicado de Elpidio José Silva: MOVIMIENTO RED SIGUE ADELANTE

Agradezco a todos y cada uno de los que me habéis apoyado en la candidatura de Movimiento RED para las elecciones europeas. Doy las gracias también por los miles de mensajes de ánimo que recibo a diario.

A quienes me preguntan qué pensamos hacer ahora, les respondo: Ahora, más que nunca, seguiremos adelante.

No podemos permitirnos derrochar el talento humano que se nos ha ofrecido, y que a partir de ahora nos permitirá crecer.

Nuestra participación en estas elecciones ha sido una experiencia intensa y, por momentos, dura. Ni yo ni la mayoría de mis más directos colaboradores procedemos de la política profesional. Hemos cometido, sin duda, errores por los que pedimos disculpas y de los que hemos aprendido.

Pero pocas candidaturas han sido capaces, con tan escasísimos medios, de enfrentarse a una campaña tan sucia y planificada de desprestigio y silenciamiento, orquestada por la práctica totalidad de los medios de comunicación del Régimen. Me he visto sometido personalmente a un linchamiento sin precedentes. En primer lugar, a través de un juicio ilegal que por dos veces ha sido anulado, marcando un hito insólito en la historia del bochorno jurídico español. Después, se sugirió que me presentaba a las elecciones para evitar una condena mediante el aforamiento. Por último, se ha dado altavoz a toda clase de injurias y difamaciones sin permitirnos siquiera el derecho de réplica.

Mentira sobre mentira.

En nada temo ese juicio desproporcionado y sin el menor fundamento. En nada tememos desde Movimiento RED las artimañas políticas, jurídicas y periodísticas con las que el Régimen intenta tapar o pisotear la verdad, para que no se castigue a los responsables.

Con hechos -no con palabras- he demostrado cuál es mi disposición, y hasta dónde estoy dispuesto a llegar en mi compromiso para que salga a flote la verdad de lo sucedido durante tantos años en España.

Saber que “no estoy solo”, que ya somos muchos con plena conciencia de lo que acontece, me llena de confianza y fuerza para proseguir la senda de RED. Desde nuestro Movimiento político estamos creando una “red de ciudadanía”, apoyo e información mutua. Pretendemos ejercer acciones coordinadas y contundentes que tendrán consecuencias. Hechos y no palabras.

Actualmente vivimos –padecemos- una situación dramática en España, mucho más grave y compleja de lo que parece. Las estructuras políticas creadas por el Régimen del 78 no están tan debilitadas como muchos creen. Aún disponen de mecanismos suficientes para perpetuarse, bajo la apariencia de cambios sustanciales, puro maquillaje. Los lazos de intereses generados durante años de corrupción no pueden combatirse ingenuamente mediante consignas fáciles, o discursos demagógicos y populistas. Esto conducirá a un desastre aún mayor.

La abdicación del monarca ha inundado las plazas de entusiasmo republicano. Y ha sido precisamente ahora, cuando surgen en el escenario político fuerzas que “pretenden” plantar cara a las siglas tradicionales del bipartidismo.

Extraña situación. A muchos parecerá casual. Pero, analizando profundamente los hechos, estar a favor o en contra de la III República, bajo la partitocracia y la corrupción institucional que padecemos, es irrelevante. Antes debemos depurar los mecanismos catalizadores de dicha corrupción, y sobre todo la impunidad que refuerza a los corruptos. Un reformismo superficial no resolverá los severos problemas que casi suprimen a nuestro país del panorama internacional. Conocemos las transformaciones imprescindibles que debemos abordar. También somos conscientes de que nunca se producirán de un día para otro, ni mediante un mero cambio en nuestra forma de Estado. Las verdaderas soluciones requieren tiempo, profunda reflexión, debate, democracia participativa y asentamiento.

Por todo ello trabajamos en Movimiento RED.

Os animo a sumaros a esta iniciativa, a no dejaros engañar por “cantos de sirena”, y a plantar cara a la corrupción allí donde deba ser combatida y erradicada.

Muchas gracias a todos. Sois lo mejor y el último sentido de RED.

Elpidio J. Silva